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miércoles, 29 de julio de 2015

La Libertad y la Ley - Bruno Leoni

¿Estudias Derecho o conoces a alguien que lo haga?: recomiéndale este libro:


Al final del libro, el Dr. Leoni compara las votaciones legislativas con el proceso de mercado. A continuación adelanto un extracto de esta última parte:


"La votación puede, desde luego, estar precedida por debates y negociaciones, que pueden ser racionales en el mismo sentido que cualquier operación del mercado. Pero cuando llega el momento de votar, ya no se discute o negocia más. Nos hallamos en una esfera distinta. Se acumulan papeletas de voto como podrían acumularse piedras o conchas; la consecuencia es que no se gana porque se posea más razones que otros, sino simplemente porque se dispone de un mayor número de papeletas ...
... el resultado final no es algo que pueda explicarse simplemente como una mezcla o combinación de las razones de todos los votantes. El lenguaje político refleja muy bien este aspecto de la votación: los políticos gustan de hablar de campañas que van a realizar, de batallas que deben ganar, de enemigos a quienes combatir, y así sucesivamente. Este lenguaje no se da, por lo general, en el mercado. Por una razón evidente: mientras en el mercado la oferta y la demanda no sólo son compatibles sino complementarias, en el ámbito político, al que pertenece la legislación, la elección de ganadores por un lado y de perdedores por otro no sólo no son complementarias sino que ni siquiera son compatibles. Es sorprendente que una consideración tan simple —y yo diría tan evidente— de la naturaleza de las decisiones de grupo (y de la votación, en particular, que es el mecanismo habitual empleado para efectuarlas) pase inadvertida tanto a los expertos como al hombre de la calle. La votación, y en particular la votación según la regla mayoritaria, suele considerarse como un procedimiento racional, no sólo en el sentido de que permite alcanzar decisiones cuando los miembros del grupo no se muestran unánimes, sino también en el sentido de que parece ser el procedimiento más lógico dadas las circunstancias... 
De acuerdo con el Dr. Downs, los argumentos básicos a favor de la regla de la mayoría simple se asientan sobre la premisa de que cada votante debería tener un peso igual respecto a los demás votantes. Por consiguiente, si se producen desacuerdos pero la acción no puede posponerse hasta alcanzar la unanimidad, es mejor satisfacer a los más que a los menos. El único arreglo práctico para llevarlo a cabo es la regla de la mayoría simple. Cualquier norma que requiera más que una mayoría simple para la aprobación de un decreto permite a una minoría impedir la actuación de la mayoría, otorgando así al voto de cada miembro de la minoría más peso que al voto de cada miembro de la mayoría.
Prosiguiendo con nuestra equiparación predilecta entre la votación y el funcionamiento del mercado, este argumento parece reducirse a la afirmación de que debemos dar un billete de un dólar a todo el mundo a fin de otorgar a cada uno el mismo poder adquisitivo. Mas cuando consideramos la analogía de cerca, comprendemos que dando por sentado que 51 votantes de un total de 100 son "políticamente" igual a 100, y que los restantes 49 (contrarios) son "políticamente" igual a cero (que es exáctamente, lo que sucede cuando una decisión de grupo se toma conforme a la regla de la mayoría), otorgamos mucho mas "peso" a cada votante que figura en el bando de los 51 ganadores que a cada votante que figura en el de los 49 perdedores.
...
Cuando concebimos la ley como legislación, aparece claramente que la ley y el mercado no pueden en forma alguna considerarse análogos desde el punto de vista del individuo y sus decisiones.
El proceso de mercado y el proceso legislativo se hallan, en realidad, ineludíblemente en desacuerdo. El mercado permite a los individuos efectuar elecciones libres con la única condición de que estén dispuestos a pagarlas, en tanto que la legislación no lo permite".

sábado, 4 de julio de 2015

La Tragedia del Euro (Philipp Bagus 2012) - Corralito en Grecia 2015


Este libro del Profesor de Economía Philipp Bagus del año 2012 lo tenía un poco apartado, pero lo cierto es que explica paso a paso como hemos podido llegar a esto. "El euro-sistema parece una imprenta de dinero que tiene diferentes propietarios que hacen uso de ella según su necesidad". 
El Dr. Bagus, experto en teoría monetaria, desenmascara de forma educada, exquisita y mesurada las intrigas políticas que tuvieron lugar en la defectuosa construcción del euro. (Aquí publiqué un post con dos puntos de vista sobre este asunto


Yo, en este post, no voy a ser mesurado ni educado ni hostias en vinagre, y más aún viendo el sufrimiento que reflejan las imágenes de este post; provocado por la basura de politicastros que  gobernaron Grecia, sí, pero especialmente, por los que gobiernan hoy, los malnacidos con todas las letras que se han apropiado de las instituciones del Estado Griego desde hace 6 meses prometiendo bienestar para todos. ¿Para esto se presentan?


Comencemos con esta entrevista (01:20:26):


- Presentador de "Al Rojo Vivo": "No tienen miedo los representantes de Syriza al corralito. No hay gobierno que resista un corralito. Te imaginas la próxima semana si los bancos se quedan sin dinero. ... imagínate esos ciudadanos, el enfado hacia el gobierno que les ha provocado el corralito puede ser inmenso, miguel..."


-Urbán: "es que quien le provoca el corralito, yo creo, que no es su gobierno ....es Draghi, es Merkel ..."

ERROR, ¡tontolaba peligroso!.