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miércoles, 26 de octubre de 2016

Neolengua - Manipulación del Lenguaje (IV) - Poder Político, Poder Económico - ( El Dólar y la Pistola, por Harry Binswanger)


Control del Lenguaje

Cambiar el significado de los conceptos: confundir libertad con poder o capacidad de hacer; equiparar pobreza con desigualdad o violencia con pobreza; llamar inflación a su consecuencia (subida de precios) en vez de a la causa (inflar la moneda); igualar poder económico con poder político. Vivimos en una sociedad infantilizada con el narcótico de la educación pública, que regala su soberanía individual y que distingue entre "poderes elegidos" (democráticamente) y "poderes no elegidos", siendo legítimos sólo aquellos, como si los útlimos no fueran nunca resultado de elecciones individuales voluntarias. Hoy día, un neoliberal ya no es liberal. Si dices "todos", no las incluyes a ellas. "Recortar" es subir impuestos y/o endeudarse. "Democracia" es "la calle" (y "expropiar). "Mejorar oportunidades" es igualar las oportunidades (es decir, igualar en resultados). No sólo existen los transexuales sino también los trans-especies. "Austericidio" no es matar la austeridad sino promoverla (homicidio, próximamente, será mejorar la vida de otro, por lo que no tendrá pena). Capitalismo es sinónimo de "patriarcado". "Libertad de expresión" es "fiscalización política de los medios de comunicación". Y "solidaridad" es utilizar el monopolio de la violencia estatal para robar a los que producen y regalárselo a los que no producen. Neo-lengua modo turbo.

Se trata de corromper el pensamiento por medio del control del lenguaje; cocinar una tortilla de conceptos en los cerebros de los electores con objeto de proporcionar un aval para la intervención de los políticos en todos los ámbitos de la vida de la gente sin que nadie reclame explicación alguna sobre medidas concretas aplicables. Llaman mercado a lo que no es mercado, es decir, a las relaciones de privilegio entre políticos, poder financiero y grandes grupos de presión que expolian a las clases medias y bajas a través del monopolio de emisión de moneda, de tributos confiscatorios y de millones de paginas de regulación en los boletines oficiales. La gente no es el mercado, dicen ciertos políticos. Se combate lo que denominan "totalitarismo de los mercados". El neoconcepto "mercantilización" excluye los acuerdos voluntarios entre individuos libres. A este paso, si una mayoría de electores es persuadida de que no forma parte del mercado, no existirá oposición alguna para dirigirlo y -en última instancia- prohibirlo. ¿Cómo?: inflando la moneda; controlando el crédito; estableciendo impuestos confiscatorios, precios máximos, salario mínimo; limitando el cambio exterior; aplicando el proteccionismo e implantando aranceles; aniquilando la libertad contractual; destruyendo el libre intercambio con extranjeros; vaciando de contenido el derecho de propiedad para derivar expropiando ante las cámaras de TV; expoliando a los productores; controlando todos los contenidos educativos de la enseñanza; promoviendo la doctrina del "decrecimiento sostenible" con falacias ecológicas; e implantando una sociedad suicida idólatra de "lo público" cuya juventud reclama su derecho a depender del Estado.




domingo, 23 de octubre de 2016

Enamorarse es como un contrato de arrendamiento: "comprometerse a dejar de buscar". - Extracto de "Cómo Funciona la Mente" de Steven Pinker

Steven Pinker

Extracto de "Cómo funciona la mente"

Locos por el amor

¿Por qué razón el amor romántico nos embruja, nos pone nerviosos o nos deja desconcertados? ¿Podría ser otra táctica paradójica como esposarse a las vías del tren? Resulta bastante posible. Ofrecerse a pasar el resto de la vida con una persona y criar a los hijos, es la promesa más importante que se puede llegar a hacer, y una promesa es más creíble cuando quien la hace no puede decir diego donde dijo digo. Sobre este punto precisamente es donde el economista Richard Frank ha llevado a cabo su ingeniería inversa del amor fou [amor loco].