El
brutal ataque de
Podemos contra
el principal accionista de Inditex, Amancio Ortega, a quien menos perjudica es a él mismo. A fin de cuentas, una reforma fiscal que consiga arrebatarle algunos millones de euros más, a estas alturas, afectaría en un porcentaje mínimo a su patrimonio personal. Y, en cualquier caso, siempre podría largarse, trasladando la sede social a otro país.
Aquí se trata de otra cuestión.
El asalto, catapultado por la envidia social, en realidad, se dirige contra la economía de libre mercado y contra la propiedad privada, para, de ese modo, alcanzar mayores cotas de poder político.
El verdadero objetivo de la formación "Unidas Podemos" es disuadir a todo potencial emprendedor de cualquier intento de imitar al multimillonario.