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jueves, 25 de febrero de 2016

"Ébole" (propagador de una grave enfermedad intelectual)

"La mayor parte de las normas destinadas a regular, dirigir o frenar el comercio, han sido, o errores políticos, o bien obra de hombres astutos en busca de su ventaja personal, con el pretexto del bien público".
GEORGE WATLEY


Cómo le explicas al propagador de una grave enfermedad intelectual denominada “Ébole” ...



Santiago Navajas, profesor de Filosofía, Máster en Análisis
y Gestión de la Ciencia y la Tecnología


 ... que la única forma de salir de la pobreza y elevar permanentemente el salario de los trabajadores es aumentando la productividad del trabajo a través de una elevación de la cuota de capital invertido per cápita, mejorando los métodos de producción. Y cómo le explicas, que sólo hay dos formas de acumular capital:

1) con ahorro propio –nacional-
2) con ahorro ajeno –internacional-

Las naciones de occidente, gracias a sistemas que han protegido la libertad individual, los derechos de propiedad y el cumplimiento de los contratos, han ahorrado e invertido los últimos 200 años (ver vídeo de abajo) como jamás había sucedido en milenios anteriores; es decir, desde el comienzo de la revolución industrial, hemos necesitado todo ese tiempo para acumular los actuales bienes de capital -materiales y humanos- requeridos para alcanzar el nivel de vida que disfrutamos hoy. Esto significa, Évole, que la única forma que tienen los habitantes de países del tercer mundo de saltarse este periodo de tiempo para alcanzar el nivel de vida de Occidente, es mediante la entrada de capital extranjero. Capital que muchas veces ha sido y sigue siendo expoliado por sus propios gobernantes.
Por si fuera insuficiente el saqueo recurrente de esos tiranos gobernantes de países miserables con élites extractivas expoliando capital extranjero a todo trapo y apropiándose de la ayuda exterior en su propio beneficio, tú Évole, con tu mierda de programa de TV estás colaborando a bloquear la entrada de ahorro internacional a esos países que intentan salir de la más absoluta pobreza. Mediante tus soflamas y tu desvergüenza bien pagada por la Tv, denigras el sistema que te permite vivir como vives y pones tu firma en la sentencia que contribuye a condenarles a décadas de años de ahorro propio, hasta que puedan alcanzar por sí mismos un nivel de vida equivalente al tuyo, pedazo de impresentable, malnacido.

Una simple trabajadora camboyana que tu mismo entrevistabas, no acepta tu buenismo, tu demagogia y tu desvengüenza. Te salió el tiro por la culata, Évole, excrecencia:



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Bonus Track

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200 países 200 años


Manuel Ayau: 
No son un juego de suma cero
(Ley de Costos Comparados)






Globalización - Johan Norberg





En el mejor de los casos, a periodistas como Évole les ocurre lo mismo que Ludwig Von Mises, en Human Action, achacaba a la mayor parte de los filósofos de su época: 

"los errores en que incurren vienen engendrados por su total desconocimiento de la Ciencia Económica e incluso, a veces, por su inaudita ignorancia de la Historia".


Camboya. El régimen comunista liquidó a un tercio de la población


Lopez Zafra - Dr en CCEE


Bono - U2


Alberto  -bipolar- Garzón - Economísta I.U.
Ropa ética ... para ricos

Exacto, Garzón, porque sólo ....



Actualización


JRR: "Que esta visión esperanzadora de Camboya se oculte 
deliberadamente y que, además, se haga con el propósito de atacar 
aquellos elementos que han permitido ese rápido desarrollo 
(el libre comercio o la inversión extranjera: la globalización, en definitiva) 
es de una crueldad difícil de imaginar desde el mullido sillón 
de nuestros hogares occidentales".


Profesor Rallo: "cortocircuito cuando descubres 
que la globalización no ha empobrecido a Camboya

Y por último, una comparación:


Évole, en su programa de  TV, denuncia, en Camboya, la explotación de los trabajadores de los proveedores de las multinacionales textiles como Primark, H&M, Inditex, etc, que pagan salarios de 170 dólares a sus trabajadores (el doble del salario medio del país).
Bien pues, si estuvieran en Cuba, de esos 170$, cada trabajador solo percibiría 12,75 $. El resto, 157,25 $, se los quedaría el Estado Cubano
En Cuba rige un sistema de doble moneda



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